02 junio 2025
Arranca el Plan de Azoteas Verdes para convertir los tejados de Madrid en espacios vecinales
El Pleno aprueba por unanimidad el plan especial para convertir tejados en desuso en cubiertas vegetales
Se ofrecerán incentivos urbanísticos y económicos para estimular la transformación de los edificios de la capital
Los usuarios podrán obtener nuevos espacios sin que compute la edificabilidad, como cuartos para bicicletas, áticos, locales y trasteros
El Ayuntamiento de Madrid ha aprobado el Plan Especial de Azoteas Verdes, una iniciativa que busca convertir los tejados en desuso de la capital en espacios de convivencia vecinal con cubierta vegetal. La medida, aprobada por unanimidad en el Pleno, forma parte de la estrategia municipal para crear entornos más sostenibles y mejorar la calidad de vida urbana.
Un potencial por explotar en la capital
Los datos revelan el margen de crecimiento existente: Madrid cuenta con 124.574 edificios en su territorio, pero apenas 100 de ellos (un 0,08%) disponen de cubierta vegetal. Esta infraestructura verde actual abarca poco más de 100.000 metros cuadrados, una superficie equivalente a diez campos de fútbol.
El Plan Especial, impulsado desde el Área de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, pretende extender significativamente estas instalaciones para combatir las altas temperaturas urbanas y crear espacios más habitables en la ciudad.
Incentivos para propietarios y comunidades
La propuesta establece ventajas urbanísticas concretas para estimular la participación ciudadana. La principal novedad es que permite la construcción de áticos en las azoteas mediante licencia directa, eliminando la necesidad de estudios en detalle en la mayoría de casos.
Los edificios que incorporen cubiertas verdes podrán habilitar nuevos espacios sin que computen en la edificabilidad máxima permitida. Entre estas posibilidades se incluyen cuartos para bicicletas, áticos, locales, aseos, almacenes y trasteros, mejorando la funcionalidad de los inmuebles.
Para edificios dotacionales de servicios colectivos, las opciones se amplían a almacenes, archivos, vestuarios, cuartos de lavandería y otras dependencias auxiliares. En el resto de edificios, exceptuando las viviendas unifamiliares, se posibilita específicamente la construcción de espacios para bicicletas.
Proceso participativo y mejoras incorporadas
Durante el período de información pública, el Plan recibió seis alegaciones, cinco de las cuales fueron estimadas parcialmente. Las aportaciones procedían de los grupos municipales Más Madrid y Socialista, Ecologistas en Acción y la Asociación de Empresas de Gestión de Infraestructura Verde.
Como resultado de este proceso, se han incorporado nuevas líneas de ayuda económica para la ejecución de las azoteas verdes, sumándose a los incentivos urbanísticos ya contemplados en la propuesta inicial.
Beneficios ambientales y urbanos
La implementación de cubiertas verdes aporta múltiples ventajas para el conjunto de la ciudad. En el ámbito térmico, estas instalaciones reducen el gasto en calefacción y climatización de los edificios, disminuyendo las emisiones indirectas de CO2 y la huella de carbono general.
Su contribución a la mitigación del efecto isla de calor resulta especialmente relevante. Las plantas extraen calor del entorno mediante la evaporación de agua y la fotosíntesis, mientras absorben y reflejan parte de la radiación solar, creando microclimas más frescos.
En cuanto a la gestión hídrica, las cubiertas verdes absorben agua de lluvia a través de sus diferentes capas, reduciendo el caudal que llega al alcantarillado y previniendo posibles inundaciones. Además, permiten la reutilización del agua almacenada para riego mediante sistemas de aljibe.
La vegetación también actúa como filtro de partículas contaminantes y fijador de gases de efecto invernadero, al tiempo que incrementa la biodiversidad urbana. Su masa adicional mejora el aislamiento acústico y térmico de los edificios.
Criterios de implantación
El Ayuntamiento ha establecido una orden de prioridades para la instalación de infraestructuras verdes. La primera opción contempla la instalación de sombras vegetales y ajardinamiento en rasante. Solo cuando esta alternativa no sea posible o resulte insuficiente, se considerarán las cubiertas o fachadas verdes como solución complementaria.
Esta estrategia escalonada busca maximizar el impacto ambiental y social de las intervenciones, priorizando aquellas que generen mayor beneficio directo para los ciudadanos a pie de calle.